Remedios para la tos
He aquí algunos remedios naturales que te aliviarán la tos.
Remedios caseros para la tos
La tos es molesta en el cine, en el concierto y en cualquier lugar público. Sin embargo, no trates de suprimirla porque es el medio que utiliza tu organismo para evacuar la mucosidad. Al contrario, debes ayudarla para desembarazarte de la mucosidad lo más pronto posible y así, de la tos misma.
Remedios para tos: La cura del caramelo
Para curar una tos no seca, chupa un caramelo de marrube, una planta dulce y amarga que actúa como expectorante, es decir, que suscita el reflejo de la tos con vistas a evacuar la mucosidad. Encontrarás los caramelos de marrube en la farmacia.
Para curar una tos seca, toma pastillas de olmo rojo. Preparadas con la corteza del árbol, estas pastillas se encontraban antaño en todos los botiquines de las casas. La corteza contiene una sustancia gelatinosa que reviste la garganta de una capa protectora y calma la tos.
¿No dispones de pastillas de olmo rojo? Cualquier caramelo te aliviará haciéndote salivar. Los caramelos tienen por resultado suprimir la tos. Los caramelos de limón son particularmente eficaces contra la tos.
Puedes preparar la «poción» siguiente: pon caramelos de menta y zumo de limón en una pequeña cacerola y caliéntalo hasta que los caramelos se deshagan. Añade miel y mezcla bien. Toma una o dos cucharadas soperas de esta mezcla.
Tos: Remedios caseros con jarabe casero
Mezcla zumo de limón con un poco de miel, añade un poco de guindilla de Cayena y tómatelo.
La miel reviste la garganta de una capa protectora calmando los tejidos irritados, mientras que el zumo de limón cura la inflamación con su vitamina C, protegiéndonos de las infecciones. En cuanto a la guindilla, aumenta la aportación de sangre en la zona, acelerando así la curación.
Otro remedio casero es mezclar dos cucharadas soperas de zumo de limón y una cucharada sopera de miel y calentar la preparación. Tome una cucharada tan a menudo como necesites para aliviarte. Puedes también añadir un poco de cebolla picada.
Pela y pica finamente seis cebollas medianas, ponlas al baño maría con media taza de miel, tapa y dejar cocer, a fuego lento, durante dos horas. Cuela la preparación y pásala a un tarro. Toma una cucharada sopera de este jarabe cada dos o tres horas.
También puedes mezclar cinco o seis escarpias con una taza de miel. Deja la preparación reposar en el frigorífico una noche. Al día siguiente, por la mañana, retira los clavos y toma una cucharada sopera de esta miel. La escarpia apacigua el dolor mientras que la miel calma los tejidos irritados de la garganta.
El azúcar cristalizado fue ampliamente utilizado en los jarabes para la tos. He aquí una receta: mezcla una caja de este azúcar con cuatrocientos cincuenta gramos de uvas pasas, el zumo de tres limones, media taza de azúcar blanco y un poco de whisky.
He aquí otro: Cuatrocientos cincuenta gramos de azúcar cande, cuatro dedales de brandy, medio frasco de miel y el zumo de tres limones.
En ambos casos deberás hacer la preparación con tiempo, porque se necesitan algunas semanas para que el azúcar cande se disuelva.
He aquí la receta de un jarabe antiguo particularmente sabroso: corta tres limones en rodajas y ponlos en una cacerola con miel y algunas hojas y flores de marrube. El marrube, una planta amarga que ha sido utilizada en la confección de caramelos para la tos, actúa suscitando el reflejo de la tos y la evacuación de la mucosidad. Haz cocer a fuego lento la preparación hasta que el jarabe se espese. Cuela y deja enfriar.
Remedios caseros para la tos: La tisana
· Tomillo: además de ser expectorante, el tomillo contiene sustancias que calman a las vías respiratorias. Pon dos cucharadas soperas de tomillo fresco (o una cucharada de tomillo seco) en una taza de agua caliente. Déjà que se haga la infusión, filtra, añade miel y bebe.
· Malvavisco: mezclado con agua, el malvavisco libera mucilage, una sustancia viscosa que reviste la garganta de una capa protectora y aclara la mucosidad presente en los pulmones, lo que facilita su evacuación. Prepara, en infusión, dos cucharadas de la planta en una taza de agua caliente. Toma tres tazas al día.
· Regaliz: diluye cuarenta y cinco gotas de tintura de regaliz en una taza de agua caliente y bebe esta preparación a sorbitos. El regaliz aclara la garganta y alivia los espasmos bronquiales. Atención: sólo toma regaliz durante algunas semanas porque puede causar una elevación de la presión arterial.
· Marrube: haz una infusión con dos cucharadas de hojas o de flores de marrube, en taza de agua hirviendo. Cuela y bebe.
Los prácticos facultativos del ayurveda, la medicina tradicional de la India, recomiendan tomar cada día algunas tazas de una tisana picante. Para prepararla pon en una taza de agua hirviendo, media cucharada de jenjibre y un poco de canela, las dos en polvo.
Ungüento y mostaza contra la tos
Préparate un ungüento para friccionar que contenga alcanfor o mentol y aplícatelo sobre la garganta y pecho. Atención: no bebas este producto.
También puedes aplicar mostaza que actuará como descongestionante. Mezcla en un tazón una parte de mostaza en polvo y dos partes de harina. Añade bastante agua para formar una pasta.
Reparte la pasta en una bayeta limpia que colocarás sobre tu pecho, pero, atención, jamás pongas la mezcla directamente en contacto con la piel. Verifica regularmente el estado de tu piel, si se pone roja o irritada interrumpe el tratamiento. Algunos añaden una clara de huevo en el agua con el fin de atenuar la sensación de calor que produce la mostaza sobre la piel.
Técnica para toser
Si una tos incesante irrita tu garganta, prueba la técnica siguiente: tan pronto como sientas la tos, tosiquea repetidas veces. Los tosiqueos rápidos atraen la mucosidad a las vías respiratorias y la tos fuerte permite evacuarlas.
Remedio a percusión para la tos
Acuéstate boca abajo sobre la cama o la alfombra. Pídele a tu compañero que con sus manos golpee tu espalda de manera rítmica subiendo hacia el cuello. Continua un rato así hasta que tus bronquios estén más sueltos.
Vapores nocturnos un remedio casero para la tos
Para prevenir las toses nocturnas, procura que el aire de tu cuarto esté húmedo. Para ello, instala un humedecedor.
Para conocer todo los secretos de los remedios caseros les recomendamos la lectura del excelente libro: El gran libro de los remedios caseros
