Frente a los efectos negativos del consumo de marihuana (impactos sobre la salud, efectos en las relaciones sociales o dificultades financieras), has tomado una sabia decisión: detener su consumo. Pero, no es fácil y dentro de poco notarás varios síntomas relacionados con la falta de consumo: ansiedad, irritabilidad, tristeza…
Son varios los trastornos que aparecen durante la abstinencia y que, a menudo, conducen a la recaída. ¿Pueden ser evitados?
Síntomas de la marihuana y efectos de la adicción
Leyendo los síntomas enumerados a continuación, se entiende como la marihuana afecta a la forma de pensar. Responde a las preguntas con un SÍ o NO. Sé honesto.
Recuerda que quienes consumen grandes dosis durante un largo período de tiempo pueden experimentar casi todos estos síntomas (los que consuman pequeñas dosis experimentarán menos síntomas).
Estos síntomas desaparecen o mejoran cuando el usuario de marihuana detiene su consumo. Debe mencionarse, sin embargo, que esto no sucede automáticamente. Deberás iniciar un tratamiento si al detener el consumo no mejoran los síntomas descritos.
En lo que respecta a tu capacidad verbal, ¿has notado estos síntomas?:
¿Eres cada vez menos capaz de encontrar las palabras adecuadas para expresarte?
Sí __ No __
¿Tienen los demás dificultad para entender lo que quieres decir?
Sí __ No __
¿Tienes dificultad para entender lo que los otros te dicen?
Sí __ No __
¿Las formas de expresar tus sentimientos han disminuido?
Sí __ No __
¿Te sientes como si estuvieras encerrado?
Sí __ No __
¿Te cuesta tomar parte en las conversaciones?
Sí __ No __
¿Te sientes solo e incomprendido?
Sí __ No __
En lo que respecta a tu capacidad para llegar a conclusiones correctas, ¿has notado estos síntomas?:
¿Ha disminuido la capacidad de controlar tu comportamiento?
Sí __ No __
¿Repites tus errores?
Sí__ No __
¿Tienes problemas para controlar y corregir tus errores?
Sí__ No __
¿No te preocupan los errores que has cometido?
Sí__ No __
¿Vives vacío de sentimientos? ¿La melancolía y la oscuridad aparecen en tu vida todos los días?
Sí __ No __
¿Te sientes fracasado? ¿Crees que no tienes éxito?
Sí__ No __
En lo que respecta a tu flexibilidad de pensamiento, ¿has notado estos síntomas?:
¿Es difícil que puedas hacer un seguimiento de tus pensamientos en una situación compleja?
Sí__ No __
¿Te has convertido en un solitario?
Sí __ No __
¿Te cuesta concentrarte?
Sí __ No __
¿Es difícil para ti mantener tu atención?
Sí __ No __
¿Te cuesta fijar tu atención?
Sí __ No __
¿Te cuesta cambiar la atención?
Sí __ No __
¿Es difícil entender las opiniones de los demás?
Sí __ No __
¿Hablas sólo con los amigos que fuman marihuana y no con los demás?
Sí __ No __
En lo que se refiere a tu memoria, ¿has notado estos síntomas?:
¿Te cuesta mantener la concentración en el tema que deseas?
Sí __ No __
¿Se te le olvidan las reuniones, citas, etc.?
Sí __ No __
¿Te cuesta controlar el tiempo que pasa?
Sí __ No __
¿Te cuesta imaginar largos períodos de tiempo?
Sí __ No __
¿Es difícil que te concentres al leer un libro, ver la televisión, etc.?
Sí __ No __
¿Te cuesta recordar el pasado?
Sí__ No __
¿Tienes la sensación de tener mala memoria y poca paciencia?
Sí __ No __
Con respecto a la parte de síntesis (técnicas analíticas / sintéticas), ¿has notado estos síntomas:
¿Rara vez cambias tus ideas o normas?
Sí __ No __
¿Te cuesta desglosar la información adecuada?
Sí __ No __
¿Te cuesta clasificar la información de manera justa?
Sí __ No __
¿Te cuesta entender el significado oculto de la información?
Sí __ No __
¿Tu actitud es la de una persona que vive una vida alternativa?
Sí __ No __
¿Consideras que eres diferente y te sientes solo / a?
Sí __ No __
¿Rara vez cambias tu forma de pensar con respecto a la resolución de problemas o la percepción social?
Sí __ No __
¿Sientes que te faltan conocimientos?
Sí __ No __
Con respecto a la capacidad de localizar en espacio y tiempo, ¿has notado estos síntomas:
¿Te cuesta tener en cuenta el entorno inmediato?
Sí __ No __
¿Te cuesta crear rutinas diarias o semanales?
Sí __ No __
¿Te cuesta distinguir el día o el año?
Sí __ No __
¿Es difícil que te des cuenta de las relaciones entre personas?
Sí __ No __
¿Es difícil que te integres con los demás?
Sí __ No __
¿Te cuesta organizar tu vida diaria?
Sí __ No __
¿Tienes la sensación de ser libre y no pertenecer al mundo?
Sí __ No __
En lo que respecta a la memoria global, ayuda a crear patrones e imágenes de lo que vemos, ¿has notado estos síntomas?:
¿Te cuesta crear patrones e imágenes visibles del mundo?
Sí __ No __
¿Te cuesta recordar la relación entre las personas?
Sí __ No __
¿Te cuesta mantener la rutina durante un día o una semana?
Sí __ No __
¿Es difícil para ti ponerle nombre a una cara?
Sí__ No __
¿Tienes la sensación de vivir en tu propio mundo?
Sí __ No __
Las preguntas anteriores se realizaron a más de cuatrocientos usuarios crónicos de marihuana. Sus síntomas nos dan las características de los usuarios crónicos de marihuana.
Tal vez no tengas todos los síntomas mencionados, pero recuerda los que tienes y fíjate en si varían después de seis semanas de abstinencia.
Adicción a la marihuana: freno para dejar de fumar porros
Si la marihuana se toma con frecuencia y en grandes dosis, cualesquiera que sean las razones por las cuales se consume, la comunidad científica está de acuerdo en que crea adicción.
Cualquier adicción se instala y establece un consumo de drogas crónico. Después de unos meses o años, la persona entra en dependencia y pierde el control sobre el producto que consume que ya se ha convertido en una necesidad.
Este adictivo comportamiento resulta limitante por todo lo que implica comprar drogas. El individuo continúa consumiendo a pesar de las consecuencias adversas (los adictos a las drogas son conscientes de su degradación y problemas que tienen pero no pueden parar de consumir).
A pesar de todo, los trastornos observados en las personas adictas a la marihuana son más ligeros que los causados por otras sustancias adictivas. Según el DSM-IV (Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales), se estima que casi el 9% de las personas que consumen marihuana en algún momento de sus vidas se vuelven dependientes en comparación con tasas de dependencia del 32% para el tabaco, 23% la heroína, 17 % la cocaína y un 15% el alcohol.
Los síntomas de abstinencia como causa de la recaída
Se dice que un dependiente de sustancias psicotrópicas tiene que tomar regularmente la droga para detener los llamados síntomas de abstinencia.
Estudios de veinte años han establecido una base de síntomas neurológicos del síndrome de abstinencia de la marihuana relacionados con la regulación de los endocannabinoides (véase el artículo sobre el modo de acción de los cannabinoides) que tiene lugar en el sistema nervioso central.
Los estudios mostraron el inicio de los síntomas de abstinencia. Estos síntomas aparecen en más de la mitad de los fumadores que intentan dejar de fumar:
- Irritabilidad.
- Ansiedad.
- Tristeza.
- Agitación.
- Trastornos del sueño: sueño excesivo.
- Disminución del apetito y pérdida de peso.
- Sudoración o náuseas.
- Síntomas más leves como fatiga, debilidad, bostezos y retraso psicomotor.
Estos síntomas de abstinencia son similares a los que aparecen cuando se quiere dejar de fumar, pero los trastornos del sueño aparecen más pronunciados en los consumidores de marihuana.
La mayoría de los síntomas comienzan entre 24 y 48 horas después de la parada del consumo y alcanzan su máxima intensidad entre el cuarto y sexto día. Duran entre una y tres semanas por lo general, pero pueden durar más si ha habido un fuerte consumo.
Se realizó un estudio en 2008 sobre 500 fumadores (entre18 y 64 años). Más de la mitad habían fumado al menos 2000 veces. Se demostró que más del 40% de estos fumadores experimentaron síntomas de abstinencia al dejarlo. Los síntomas más comúnmente citados son los antojos, irritabilidad, aburrimiento, ansiedad y trastornos del sueño.
Aproximadamente un tercio de la gente reconoció volver a fumar para aliviar o evitar esos efectos.
Estos síntomas provocan malestar y angustia. Es por eso que los expertos recomiendan un acompañamiento psicoterapéutico para apoyar al individuo en sus esfuerzos de abstinencia y, también, para evitar la recaída.
Sentirte apoyado mientras dejas de fumar porros
Diversos acompañamientos pueden ofrecerse a los que quieren salir de la adicción. En este tipo de terapias se aumenta la motivación del individuo para dejar las drogas (entrevista motivacional MET) o terapia cognitiva conductual (TCC). Estas terapias se centran en factores desencadenantes del consumo y enseñan las habilidades necesarias para hacer frente a los problemas y resolverlos.
Se trata de apoyar a la persona y ayudarla durante sus períodos de abstinencia (enfoque de manejo de contingencias o CM).
Se ofrecen métodos como balance de marihuana, evaluación adolescente de la marihuana, cambio guiado, terapia familiar…
En general, para detener el consumo han demostrado ser buenos los métodos basados en terapias de comportamiento. Sin embargo, las tasas de éxito son modestas. En el mejor de los casos, sólo el 50% de los adultos que siguen este tipo de programas se encuentran en abstinencia después de dos semanas. Después de un año, la mitad de ellos vuelve al consumo de la marihuana.
Un estudio realizado sobre 36 personas mostró resultados similares: después de completar las 12 semanas de terapia de apoyo (TCC), el 60 % de los fumadores de marihuana recayeron después de dos meses.
Las sesiones de relajación para prevenir la recaída también demostraron su eficacia: al cabo de seis meses, el 40% seguía sin consumir.
Las señales que advierten de una recaída
Si el destete conduce a la libertad, también es la culminación de un largo y rocoso camino donde la recaída es posible. ¿Es predecible?
Algunos estudios han concluido que ciertos síntomas sufridos durante la abstinencia son predictivos del riesgo de recaída. Los investigadores comprobaron que 49 adictos que sufrían síntomas como tensión física, trastornos del sueño, ansiedad, depresión, cambios de humor y pérdida de apetito tuvieron más riesgo de recaída que los que presentaban sofocos, fatiga y sudores nocturnos.
Los que tuvieron más inconvenientes durante la abstinencia demostraron ser los mayores consumidores de marihuana a partir de entonces.
Pero, para otros autores, no existe una correlación entre la severidad de estos síntomas y la ocurrencia o no de una recaída
Sugieren los expertos una reducción gradual en el uso de marihuana antes de hacer un intento de retirada para reducir los efectos desagradables y mantener la abstinencia.
Las personas con trastornos psicóticos como delirios, alucinaciones y un comportamiento más o menos desorganizado experimentaron un alto riesgo de recaída.
Los jóvenes depresivos pertenecen a una población vulnerable. En ellos, son comunes la recaída, irritabilidad, agitación y ansiedad que auguran una rápida reanudación del consumo de marihuana.
¿Medicamentos para controlar la abstinencia y el impulso de consumir?
Si las terapias tienen limitaciones, la farmacopea puede, en cierta medida, aliviar los síntomas de abstinencia. Varios fármacos alternativos (mitrazapine nefazadona, por ejemplo) mostraron una mejora sustancial en alguno de los síntomas, mientras que otros fueron menos convincentes (divalpoex o bupropión).
Inesperadamente, la naltrexona parece aumentar en vez de disminuir los síntomas asociados con la abstinencia cuando se administra a individuos que no reciben un apoyo terapéutico paralelo.
En realidad, sólo el dronabinol (equivalente sintético de psicotrópicos THC), mediante la ingesta oral, parece prometedor. Logró reducir significativamente la mayoría de los síntomas de abstinencia tales como la necesidad de consumir, ansiedad, tristeza, trastornos del sueño y escalofríos.
Este medicamento eliminaría los síntomas de abstinencia al permitir que la gente enjuicie con mayor facilidad el consumo de marihuana. El dronabinol alienta, además, a los bebedores a permanecer más tiempo en su terapia.
Consulta siempre con tu médico.
Por último, aunque no existe ninguna píldora milagrosa en la actualidad que permite cortar el consumo de marihuana, los expertos buscan nuevas vías de investigación.
Sus trabajos se centran en torno a los procesos de la memoria relacionados con la absorción del fármaco. Sorprendentemente, en lugar de disminuir, esta memoria crece gradualmente a medida que pasa el tiempo de abstinencia. Un lugar, una persona, un objeto asociado con el consumo de drogas son suficientes para reactivar la memoria del placer vivido y el deseo de consumir.
Cinco consejos para dejar de fumar porros
Saber por qué fumas porros
En primer lugar, es muy útil entender por qué fumas porros. La persona debe tener en cuenta en su «parada» si su motivación era la relajación o no querer enfrentarse a los problemas.
Calcular el dinero que te cuesta fumar porros
El método sugiere apuntar durante una semana, el costo real del presupuesto de marihuana y multiplicar el costo por 52 para darse cuenta de la cantidad real de dinero (muy por encima de lo que piensan los jóvenes) que se gastan en fumar porros durante el año.
Fijar una fecha D para dejar de fumar porros
Es imprescindible fijar un gran día para parar el consumo. Será más fácil para conseguir el esfuerzo necesario. La ausencia de THC (ingrediente principal de la marihuana) obligará al ex fumador de marihuana a renunciar a los beneficios de la felicidad, al igual que a la capacidad de quedarse dormido en dos minutos después de fumar un porro.
Aprender a controlar la ansiedad de la abstinencia
Sin embargo, en las semanas siguientes a la suspensión del consumo, se puede estar más ansioso, irritable, tener alteración del sueño y náuseas. «No te preocupes. Forma parte del proceso normal de eliminación del producto en el cuerpo. Tu cuerpo pronto encontrará el equilibrio», dice el doctor.
Hablar con un especialista
Puedes pedir cita con un toxicólogo en el hospital. Él te explicará los pasos a seguir para dejar de consumir.
Para ir más lejos, les recomendamos el excelente Dejar la marihuana
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