En América del Norte, una de cada diez personas sufren de migrañas y la mayoría de ellas son mujeres. Las migrañas, generalmente, aparecen entre los diez y los cuarenta años. Después de los cincuenta a menudo desaparecen entre las mujeres postmenopáusicas.
Causas
La migraña es una afección que sobreviene al nivel del cerebro y de los vasos sanguíneos del cerebro y de la cabeza. Por razones que ignoramos, el cerebro se vuelve hiperactivo como consecuencia de una exposición a ciertos disparadores medioambientales tales como la luz o algunos olores. Hay una serie de cambios químicos que irritan los nervios sensibles al dolor situados alrededor de la cabeza, y una dilatación de los vasos sanguíneos que dejan escapar algunas sustancias químicas que irritan más estos nervios.
Las migrañas parecen presentar un componente familiar, pero sólo una causa genética ha sido establecida para un tipo raro de esta afección: la migraña hemipléjica familiar.
Aunque las causas precisas de la migraña son un misterio, algunos de los disparadores posibles son conocidos: costumbres o circunstancias asociadas a la aparición de migrañas.
El disparador más importante es una modificación hormonal que dos tercios de las mujeres sufren, con dolores de cabeza, en el momento de sus menstruaciones. Entre las mujeres, las migrañas son generalmente más intensas en el momento de la pubertad y, a menudo, desaparecen en la menopausia.
Los alimentos también son disparadores de ellas:
· El alcohol, más particularmente el vino tinto y la cerveza.
· Los alimentos fermentados o adobados.
· El aspartamo.
· La cafeína.
· El chocolate.
· Los quesos envejecidos.
· El glutamato monosódico (GMS).
· El tabaco.
Otros factores también pueden poner en marcha la migraña:
· El hambre.
· Una modificación de las costumbres del sueño.
· Una modificación de la presión barométrica.
· El estrés.
Síntomas de la migraña y complicaciones
Las migrañas son más intensas y persisten más tiempo que los dolores de cabeza ordinarios. Además, el dolor es localizado y a menudo se concentra sobre un ojo. Los dolores de cabeza intensos que tocan sólo un lado de la cabeza se conocen por migrañas. Éstas, a menudo, se acompañan de náusea y vómitos, así como de una hipersensibilidad a la luz y al ruido. El dolor a menudo empeora cuando las personas se mueven o se inclinan. La tendencia de estas personas es a encerrarse en un cuarto sombrío, evitando toda estimulación.
Una de cada cinco personas que sufren migraña notan la presencia de una «aura» inmediatamente antes de la aparición de los dolores de cabeza. Son efectos visuales que pueden tomar la forma de relámpagos luminosos, de líneas de colores vivos o de un desdoblamiento de la vista. En ciertos casos, la persona se siente debilitada o experimienta dificultades para hablar. Estos síntomas habitualmente desaparecen después de quince o treinta minutos para ser reemplazados por dolores constrictivos y, en ciertos casos, náuseas graves.
Las migrañas no deben ser confundidas con dolores de cabeza de rebote. Los dolores de cabeza de rebote, pueden aparecer entre las personas que consumen AAS (ácido acetilsalicílico) u otros analgésicos contra los dolores de cabeza durante más de quince días al mes. Pueden también aparecer en las personas que emplean más de diez días al mes antálgicas narcóticas (por ejemplo, la codeína), asociaciones medicamentosas que reagrupan más de un antálgico o medicinas de las que el nombre acaba por «triptan» (almotriptan, rizatripan, sumatriptan). Estos son a veces los llamados dolores de cabeza inducidos por medicinas. Las medicinas son eficaces durante cierto tiempo pero cuando sus efectos se pasan, el dolor vuelve de modo más pronunciado. Si tomas antálgicos para conseguir el alivio, el ciclo vicioso prosigue. Quedan, como resultado, unos dolores de cabeza constantes y lancinantes a ambos lados de la cabeza y que se agravan cada vez que el efecto de los antálgicos desaparece. Si esperas sufrir dolores de cabeza de rebote, pídele a tu médico que te indique la mejor manera de librarte de ellos.
Un estudio a largo plazo parece indicar que las mujeres que sufren de migrañas están expuestas a riesgos aumentados de accidente vascular cerebral. La migraña generalmente toca a las personas jóvenes, y los accidentes vasculares cerebrales son raros entre esta población. La relación entre la migraña y los accidentes vasculares no está bien establecida y más estudios son necesarios.
Diagnóstico
No hay prueba diagnóstica cerebral (tomodensitometrie) que permita descubrir, con éxito, la migraña aunque sí pueden servir para eliminar otras causas eventuales de dolores de cabeza. Los médicos se fían de los síntomas de una persona para diagnosticar el problema. Puede que tu médico te pida que anotes un diario sobre tus dolores de cabeza para ayudar a establecer el diagnóstico de migraña.
Tratamiento de la migraña y prevención
Es a veces posible reducir el número de migrañas evitando los disparadores eventuales. Éstos no son siempre fáciles de identificar. Los médicos recomiendan anotar cuando se producen los dolores de cabeza. Anotando las circunstancias que rodean la aparición de las migrañas (las emociones, los alimentos consumidos), es posible conocer qué hay que evitar con el fin de reducir el riesgo de migrañas.
Para reducir el número de ataques, es importante dormir bastante, evitar las causas inútiles de estrés y mantener buenas costumbres alimentarias, así como un programa de ejercicio regular. Otras técnicas como el yoga, la meditación y las técnicas de retroacción biológica, también pueden ser útiles. Cuando estas medidas son insuficientes podemos recurrir a las medicinas. Anota las técnicas que probaste y tu grado de éxito.
Hay dos principales tipos de medicinas contra la migraña. Las medicinas abortivas son utilizadas para reducir los dolores en caso de ataque, y las medicinas profilácticas son administradas con el fin de prevenir las migrañas. La elección del tratamiento depende de la intensidad de la migraña, de la presencia de otros problemas médicos y de la frecuencia de las migrañas.
Las medicinas abortivas son:
· Los antálgicos que contienen ácido acetilsalicílico, acétaminophène, ibuprofeno, naproxeno, que están indicados contra las migrañas que van de ligeras a moderadas.
· El métoclopromide, el chlorpromazine, el prochlorpérazine y el dimenhydrate, también pueden ser utilizados.
· Las preparaciones de espolón, que contraen los vasos sanguíneos dilatados (ergotamine o el dihydroergotamine).
· El triptans (sumatriptan, naratriptan, zolmitriptan, rizatriptan, almotriptan, frovatriptan y élétriptan), que imitan la acción del mensajero químico serotonina y contraen los vasos sanguíneos.
Las medicinas profilácticas son:
· Los anticonvulsivos, como el ácido valproïque, divalproex sódico, gabapentine y topiramate, que pueden estabilizar las células nerviosas y prevenir la hipersensibilidad cerebral que pone en marcha la migraña;
· los antidepresivos tricycliques, como el amitriptyline y el nortriptyline, que actúan como antálgicos a dosis más débiles y aumentan el nivel de otras sustancias químicas en el cerebro.
· Bloqueadores de la serotonina como pizotifène, pueden también revelarse eficaces.
· Los hipotensores como los betabloqueantes (propranolol o el métoprolol), candésartan, lisinopril y el bloqueador de los canales cálcicos (flunarizine y vérapamil), pueden prevenir los dolores de cabeza estabilizando los vasos sanguíneos.
· Riboflavine (vitamina B2), la coenzima Q10 o los suplementos de magnesio, pueden ser útiles para ciertas personas que sufren de migrañas.
Otros tratamientos pueden también ser recomendados por los especialistas:
· Las hierbas medicinales como Matricaire, que podría contribuir previniendo las migrañas.
· Las terapias comportamentales, que pretenden enseñar cómo evitar los elementos disparadores de los dolores de cabeza modificando el comportamiento.
· Las terapias de relajación y de retroacción biológica, que pretenden enseñar a las personas afectadas a controlar funciones corporales como la temperatura y el pulso.