Posición de meditación para principiantes: posturas para meditar

Posiciones de meditación

Posición de meditación

Cuando practicamos la meditación, es importante tener un asiento confortable y una buena postura.
El aspecto más importante de la postura es mantener la espalda derecha.

Para ayudarnos, si estamos sentados sobre un cojín, nos aseguraremos que la trasera del cojín esté ligeramente más elevada que la delantera, con el fin de que nuestro cuerpo esté  ligeramente inclinado adelante.

Posición de meditación y respiración

Al principio no es necesario sentarse con las piernas cruzadas, aunque es buena idea acostumbrarse a sentarse en la postura de Buda. Si no podemos mantener esta posición de meditación, escogeremos  la más parecida posible, de manera confortable.

Posturas para meditar sentado: principiantes

1. Las piernas deben estar cruzadas en la postura-loto. Esto nos ayuda a disminuir los pensamientos y los sentimientos de afecto negativo.

2. La mano derecha debe estar sobre la mano izquierda, las palmas torneadas hacia arriba, las puntas de ambos pulgares ligeramente levantados, poniéndose en contacto. Las manos deben estar colocadas  cuatro anchuras de dedo, debajo del ombligo. Esto nos ayuda a desarrollar una buena concentración. La mano derecha simboliza el método y la izquierda la sabiduría, ambos conjuntos simbolizan la unión del método y de la sabiduría. Ambos pulgares situados al nivel del ombligo simbolizan el brillo del interior.

3. La espalda debe estar derecha. Esto nos ayuda a desarrollar y  mantener un espíritu claro, y permite a los vientos de energía sutil circular libremente

4. Los labios y los dientes están en su posición acostumbrada, pero la lengua toca la trasera de los dientes superiores. Esto impide una salivación excesiva y evita también que nuestra boca se seque demasiado.

5. La cabeza debe estar un poco inclinada adelante, con la barbilla ligeramente recogida para lo que los ojos estén dirigidos hacia abajo. Esto ayuda a impedir la excitación mental.

6. Los ojos ni muy abiertos, ni completamente cerrados, sino a la mitad y mirando hacia abajo en el prolongamiento de la línea saliente de la nariz. Si nuestros ojos están demasiado abiertos, estaremos sujetos a la excitación mental y si están cerrados, al entumecimiento mental.

7. Los hombros están al mismo nivel y los codos ligeramente separados del cuerpo, con el fin de permitir al aire circular.

Si se llega a colocar el cuerpo en esta postura, la estabilidad mental aparece y el movimiento desordenado de los pensamientos cesa automáticamente, exactamente como cuando se cierra con llave la puerta de una casa y nadie penetra en ella.
A esto puede añadirse el esbozo de una sonrisa ligera, que se consigue aflojando la cara y liberando  pensamientos negativos. Podemos hablar con esta imagen de la «Sonrisa del Buda».

Finalmente, la cuestión de la respiración es primordial. Salvo instrucción especial, la respiración únicamente se debe hacer por la nariz. La atención puesta en la respiración contribuye a la pacificación mental y física.

El modo correcto de disfrutar de una respiración amplia y profunda, es practicar la respiración abdominal: a la inspiración, el abdomen se hincha, permitiendo a la parte baja de los pulmones tomar una buena cantidad de aire, a la espiración, el abdomen se afloja y vuelve. La respiración abdominal correctamente practicada tiene por resultado el  calmar las emociones perturbadoras (agitación mental, cólera, angustia).